Llegamos a San Borja, muy cerca al cruce de Av. Guardia Civil y San Borja Norte, para visitar Dallas, Pollos y Parrillas. Me atrevería a decir que no existe sanborjino que no haya experimentado las delicias de este restaurante, donde además yo considero es el hogar de uno de los mejores Pollos a la Brasa de la ciudad.
Sin rodeos, empezamos con el plato estrella de la casa: el Pollo a la Brasa. No tuvimos que esperar mucho para que llegue a nuestra mesa y nos deje con la boca abierta. ¡Tiene una pinta espectacular! Se trata de un pollo de buen tamaño, super jugoso y con una piel doradita y crocante. Además, llegó acompañado de unas papas amarillas crujientes por fuera y suaves por dentro. ¡Cuidado!, si las combinas con mayonesa pueden ser realmente adictivas.
Completamos la experiencia con otro de sus fuertes, las parrillas. Pedimos una parrilla mixta para compartir, que por el tamaño es como para dos personas, pero realmente comimos tres y quedamos más que satisfechos. Llegó muy bien surtida, como para disfrutar un poco de todo: carnes, chorizos y costillas bbq.
Este plato es una de esas opciones fija para los amantes de las carnes, ya que no solo podrán saborear distintos cortes, sino que además todos son realmente espectaculares. Definitivamente, en Dallas no hay pierde.
Su gran variedad en la carta y la calidad de los platos hacen de este lugar un punto de encuentro ideal para celebrar cualquier ocasión. No hay duda que con el pasar de los años, Dallas ha sabido reinventarse, pero no ha perdido su esencia, y sobre todo, aún mantiene el sabor y sazón de un Pollo a la Brasa exquisito.